sábado, 20 de julio de 2013

Detuatu y Educación para la Ciudadanía (I)

El curso 2012-13 es el primero que he impartido la asignatura de 2º de la ESO de ciudadanía. En el instituto tenemos un ambicioso programa de aprendizaje servicio solidario (en adelante aps) y quería incorporar a dicho programa a los alumnos de 2º de la ESO a través de mi asignatura. Una materia que tiene entre sus objetivos formar ciudadanos que conozcan su entorno y que puedan incidir sobre este para transformarlo en un lugar más justo, es una buena plataforma para enganchar con un proyecto de aprendizaje servicio.

En la programación incluí como objetivos el participar de alguna experiencia de aps, en la metodología de trabajo la creación de equipos de trabajo destinados a tal fin, en los criterios de evaluación y calificación, su compromiso con el trabajo solidario realizado. De este modo planteé a los alumnos que una parte de la nota de la materia (concretamente el 30%) se conseguía participando en alguno de los programas que les ofrecía.  

Por un lado tenía interés en que todos tuvieran una experiencia de aps y quería valorarlo positivamente, pero también me daba cuenta que se trataba de una opción que debían elegir los alumnos. De este modo si un alumno no quería participar en este programa voluntario solo podría sacar un 7 en la asignatura. ¿era una decisión justa? Los proyectos que ofrecí se realizaban inicialmente fuera del centro y en horario de tarde o en vacaciones: campaña de recogida de juguetes de navidad, acompañamiento escolar en un colegio cercano al centro, participación en el banco de alimentos local o proyecto Marea Verde (intervenciones en ecología en el ayuntamiento de Coslada). ¿Podía impedir que un alumno que no quisiera o pudiera participar en un aps en horario de tarde o de vacaciones obtuviera más de un 7 en la materia?

Ocurriendo dos circunstancias, por un lado el 90% de los alumnos se apuntaron a alguno de los proyectos, por otro lado y con ánimo de no dejar a nadie fuera incorporé dos proyectos nuevos que podrían realizarse en el centro y en horario escolar: por un lado la participación en un periódico del centro y por otro la elaboración de videos didácticos, lo que acabó convirtiéndose en Ediciones Detuatu. De esta manera todos podrían participar de una u otra manera y si alguien no quería hacerlo era exactamente igual que si no quería estudiar el examen (que también aportaba el 30% de la nota).

No hay comentarios:

Publicar un comentario